sábado, 24 de mayo de 2014



Hoy desperté muy temprano, mamá había salido, así que me vestí, tome una taza de café muy caliente, encendí mi auto y fui al cementerio.  Decidí no llevar flores… solo un papel  con un arcoíris de fondo y un bolígrafo con tinta rosada de esas que utilizas para escribir corazones y frases cursi cuando estas enamorada.
La mañana estaba hermosa, el sol resplandeciente… En el cementerio apenas se encontraba gente dando mantenimiento a las tumbas  y algunas personas  visitando lo que un día fueron sus amigos o seres queridos.  Busque la tumba de papá, hoy  hace un año de su partida. Me senté en el césped  muy cerca de la placa que lleva su nombre.  Saque el papel y la pluma rosada de mi bolso, pero las oraciones pasaban tan rápido por mi cerebro que mis manos me resultaban inútiles.  Al final solo escribí “Te amo papá”… cabe un hoyo con mis manos y enterré mi arcoíris con letras rosadas.
En algún momento entre la mugre que invadía mis uñas y las lágrimas que salían de mis ojos me perdí  en el tiempo. Hasta que de pronto la voz de un señor  de mantenimiento me saco de mi trance acercándose  a mí con un cubo con agua y ofreciéndome  verter la misma para lavar mis manos… Yo solo asentí, estire mis manos mientras él decía… “Usted es muy joven para andar tan triste, allá afuera le espera una vida…vaya, que los muertos donde menos se encuentran es aquí”.  Solo di las gracias por el agua y él se marchó… Bajé mi cabeza y con un trozo de mi vestido limpie un poco mi rostro y marche a casa repitiendo en mi cabeza “Allá afuera te espera una vida”... ¿Coincidencia? No sé, pero creo que fue papá.

I miss you daddy

One year